Hablas webadas

Recientemente le tuve que dar matarili a un comentario idéntico al título de esta nota: Hablas webadas. No por censura, ni por un triple A (Arranque de Ardillez Auténtica), sino porque era una obviedad. ¿Pues qué esperaba este anónimo? Cuando estás en la web, no se puede sino hablar webadas.

Viendo en retrospectiva hasta me parece simpático que nuestro mentado anónimo en su triple A, haya escrito semejante pavada. Imaginemos el caso.

  1. Anónimo recibe un inquietante mensaje de spam "Are you really satisfied with your penis size?", picado por la curiosidad, hace clic sobre el enlace del mensaje de correo.
  2. Se halla con una serie de testimonios, fotografías y textos que describen una técnica ancestral para pasar del tamaño "mini" al tamaño "oh, my dog". Invariablemente, tal cantidad de estímulos acaban por ponerlo a mil.
  3. Interrumpe su exploración del sitio para ingresar una búsqueda en Google: "Imágenes de porno en Internet", por una de esas casualidades de los algoritmos, se topa con esta bitácora.
  4. Al ver que los materiales están fuera de sus expectativas, se cabrea y publica un mensaje de penita ajena, para liberar tensión: "Hablas webadas".
  5. Regresa a ver el resultado de su ataque, digno de un hacker de película de bajo presupuesto y guionista poco imaginativo, y se halla con que su mensaje fue eliminado.
  6. El público aplaude frenético, mientras el autor deste blog caravanea, esperando un encore.

Como verán, no es mala vibra, al contrario, les evito las rebuznancias. Como dice la bella Shazzia Thaleb: "La frase 'puto del orto' es redundante". ¿A poco no los pone a pensar?

Comentarios

Entradas populares